El género Agave es endémico de América, y el territorio méxicano es hogar de 150 de sus 200 especies, muchas de ellas endémicas. Históricamente, los agaves han sido utilizados por las culturas prehispánicas para obtener alimento, fibra, bebidas alcohólicas y en la agricultura. Esta planta ha jugado un papel crucial en la subsistencia y desarrollo, demostrando su versatilidad y utilidad. En nuestro jardín, los agaves se presentan en toda su diversidad y esplendor. Conocer estas plantas es descubrir una parte esencial de la historia y cultura mexicana, así como su importancia ecológica.